Dolor lumbar
Con el ritmo de vida actual y los trabajos en los que nos pasamos mucho tiempo frente al ordenador, al final nuestra espalda sufre y por tanto sufrimos dolores lumbares. Es por ello que en muchos casos el uso de una faja lumbar nos ayuda a corregir la postura y prevenir dolores o lesiones de espalda. Así que cuida tu espalda y evita dolores manteniendo posturas correctas, cargando poco peso y realizando ejercicios de espalda y estiramientos o deportes como la natación.
Además, para prevenir o aliviar el dolor de espalda las fajas lumbares pueden ser un refuerzo de gran ayuda. Una faja lumbar es una prenda interior elástica que a modo de corsé ciñe la zona lumbar de la espalda a través de la compresión. los médicos suelen recomendar su uso en los casos más serios de dolor agudo de la espalda baja. El uso de una faja lumbar permite que la musculatura afectada no realice su esfuerzo de sujeción normal, lo que alivia el dolor de forma casi inmediata
Las causas más frecuentes del dolor de espalda son los movimientos inadecuados o bruscos, las malas posturas incómodas para la espalda, bien al serntarse o en la cama, etc) y cargar con pesos levantando pesos doblando la espalda y no las rodillas, etc. Por eso es necesario adoptar buenos hábitos que nos ayuden a cuidar nuestra espalda:
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Si estás en el trabajo, es importante cambiar de postura cada cierto tiempo y hacer ejercicios de relajación para evitar que la tensión se acumule. Al recorrer una larga distancia conduciendo debes descansar cada dos horas y realizar estiramientos para que los músculos del cuello y espalda no acaben doloridos.
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Si estás sentado, evita cruzar las piernas y apoya los pies en el suelo. Mantén siempre las espalda pegada al respaldo de la silla.
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Para dormir la postura idónea es la fetal, es decir, de lado y con las piernas juntas y las rodillas flexionadas, aunque también se puede dormir boca arriba con un par de almohadas debajo de las rodillas. Evita dormir boca abajo ya que así sufre mucho la zona lumbar. Utiliza un buen colchón rígido.
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Al coger un peso, hazlo siempre doblando las rodillas y manteniendo la espalda lo más recta posible.
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En cuanto alcalzado, procura que no sean zapatos planos ni que tengan mucho tacón, lo ideal son 3-4 cm. A ser posible utilízalos con suela de goma para evitar las vibraciones que afectan a la columna.
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Por último en la dieta, no debemos abusar de las proteínas y debemos controlar al máximo las grasas pues estas sobrecargan el tejido muscular. Para aliviar el dolor de espalda conviene realizar 4 comidas diarias: desayuno (incluir fruta y leche), almuerzo (incluir vegetales cocidos al vapor o ligeramente cocinados (col, coliflor, espinaca, zanahoria), merienda (incluir fruta fresca o zumo de frutas) y cena (incluir un tazón o fuente de ensalada de vegetales crudos (tomate, zanahoria, col, pepino, rábano, lechuga).
Una ayuda en ocasiones para prevenir dolores de espalda pueden ser las fajas lumbares ortopédicas para personas que no sufren problemas de columna pero que de forma puntual han de realizar un esfuerzo excesivo para su espalda como levantar una gran cantidad de peso. O también en ancianos con dolor agudo o crónico a los que les falta musculatura y no pueden hacer ciertas cosas. Para niños o adolescentes en crecimiento en los que el ejercicio no es suficiente para detener el progreso de la curvatura de su espalda.
De todos modos, la faja es conveniente usarla solo en las ocasiones que supongan un mayor riesgo para la espalda pero siempre durante pocos días.